1. Valle de Ambroz, Extremadura

Este año, nuestra expedición otoñal irá al Valle de Ambroz en el norte de Extremadura, donde nos quedaremos en Hervás, un pequeño pueblo con encanto. Igual no es un destino muy conocido, pero sí uno donde se puede disfrutar mucho del otoño.

El Valle del Ambroz tiene montañas que superan los 2.000 metros y zonas de vega y dehesa a solo 500 metros de altitud. Una de las muchas cosas que se pueden hacer es practicar el senderismo ya que hay más de 200 kilómetros de senderos homologados.
Cada año, hay una programación especial: Otoño mágico en el valle de Ambroz. Este año empieza el 30 de octubre. Habrá visitas guiadas todos los fines de semana en noviembre, un día infantil, conciertos y muchas cosas más.

2. Parc Natural del Montseny, Cataluña

A solamente una hora de Barcelona, este parque natural es ideal para hacer una excursión de un día con niños (para escaparse de la gran ciudad) o para quedarse a saborear el otoño durante más tiempo. Aquí, las protagonistas son las hayas, los castaños y alcornoques que con sus colores llamativos cambian el paisaje en un cuadro.

3. Hayedo de Tejera Negra, Guadalajara

La Senda de Carretas es la más recomendable para hacer con niños. Es una senda circular de unos 6 kilómetros. Muy importante: en otoño, hay que reservar parking. Si estáis por la zona, podéis visitar también el bonito pueblo Majaelrayo, uno de los pueblos en la ruta de los Pueblos de la Arquitectura Negra de Guadalajara, que sorprende por su arquitectura y también por sus alrededores.

4. Selva de Irati, Navarra

Igual uno de los lugares más famosos para ver el otoño en España es el bosque de los bosques: la Selva de Irati. Precioso en otoño, cuando las hayas y abetos cambian de color. Para llegar a la selva, hay dos accesos, desde Ochagavía o Orbaitzeta. En la selva hay muchas rutas que se pueden hacer en familia. Desde Ochagavia hay por ejemplo una pequeña ruta de 2 kliómetros que se llama el paseo de los sentidos y que pasa por una zona de hayas. La única dificultad es que se tiene que cruzar el río…..

5. Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, Huesca

Este destino, lo recomendamos sobre todo para familias que están acostumbrados a andar.
En el Parque Nacional de Ordesa hay muchas rutas que se pueden hacer a pie con niños, incluso algunos tramos con carrito. La ruta de la pradera de Ordesa hasta la Cola de Caballo es la ruta mas conocida del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. Es una ruta cómoda con un desnivel de unos 600 metros, que pasa por un hayedo-abetal precioso. Es una ruta larga (unos 17km en total, para más información mira el mapa), pero se puede hacer sin necesidad de llegar a la Cola de Caballo, disfrutando del colores del bosque.

Otra ruta para ver el hayedo, más corta, es la que va desde la pradera de Ordesa a las cascadas de Arripas, y vuelve a la pradera. Son unas 2,5 horas en total y con un desnivel de tan solo 100 metros.